Empobrecimiento cultural y humano. Obtener ganancias sin ninguna gloria ni mérito
Empobrecimiento cultural y humano. Uno se hace empresa para ganar mucho dinero…
Una empresa tiene un buen producto.
Para mejorar el producto, la cadena de producción e invertir en tecnología, trata de mejorar continuamente.
Ese debería ser el objetivo.
En el caso de las medianas/grandes empresas, esto no ha sido así durante mucho tiempo.
No puedo dejar de preguntarme cómo ha sido posible llegar al punto de desvincularse tanto de la realidad productiva en favor de la especulación fácil.
Incluso perdiendo ese placer de crear, construir, dar vida a algo que puede ser utilizado por tanta gente porque es útil en la vida cotidiana.
No son consideraciones económicas, sino psicológicas.
La lógica de constituirse en sociedad anónima solo se puede comprender cuando se tiene la voluntad de invertir fuertemente en investigación sin depender de bancos u otras entidades de crédito.
Pero la respuesta es en realidad aún más sencilla.
Uno se convierte en sociedad anónima exclusivamente para ganar mucho dinero.
Pero, ¿es realmente completa esa respuesta?
El dinero o el poder son necesarios para obtener las cosas básicas de la vida, entre ellas hacer que la vida sea agradable para uno mismo y sus seres queridos.
Pero, ¿realmente se necesitan decenas de millones de dólares o más para ello?
¿Se necesita más dinero del que ofrece un negocio bien remunerado?
Yo creo que no.
Sin embargo, esta es la dirección que ha tomado una mentalidad muy extendida que indica un deseo definitivo de obtener beneficios sin ninguna gloria ni mérito.
Ni siquiera esa vanidad bondadosa que hace que uno se sienta orgulloso de lo que sabe hacer con sus habilidades, su talento y su capacidad.
Es una verdadera lástima.
La razón del empobrecimiento, primero cultural y luego humano, que se está produciendo.
