Cómo desarrollar el pensamiento crítico. Reconocer los propios errores es fundamental en la vida

noviembre 28, 2024 Reflexiones de una hereje

Errar es de humanos.
Pero persistir en el error es de necios.

«Reika Sanjo»


Cómo desarrollar el pensamiento crítico. Reconocer los propios errores es fundamental en la vida

Cómo desarrollar el pensamiento crítico. Reconocer los propios errores es fundamental en la vida
Cómo desarrollar el pensamiento crítico.

A veces no tomamos las decisiones correctas y ganadoras en la vida.
Pero esto nos ayuda a crecer, a ser mejores personas y a aprender de nuestros errores.

Es una frase aparentemente banal.
Que en realidad esconde una profunda verdad.

Cuando te planteas este hecho, en realidad te estás planteando un problema que, traducido a otros términos, es:

«Me gustaría mejorar. ¿Podrían los errores ser una oportunidad para hacerlo?».

Desde que nacemos, no hacemos más que aumentar nuestra capacidad intelectual gracias a ellos.

Un día oí un comentario interesante sobre este tema :

«¿Por qué los adultos no llegan a ser más inteligentes?
Porque tienen miedo de admitirlo».

Olvidando que es precisamente cometiendo errores como han aprendido todo lo que saben.

Cada vez que cometemos un error y recordamos conscientemente lo sucedido, si se repite la misma situación, recordaremos el error y nos comportaremos de tal manera que no se repita.

Personalmente, he cometido muchos y seguiré haciéndolo, al menos hasta el final de mi vida.
Pero casi nunca vuelvo a cometer el mismo error.



Reconocer los propios errores es fundamental en la vida.
Aunque el aprendizaje es muy subjetivo.

De hecho, la mayoría de la gente sigue repitiendo los mismos errores.
Pero nunca aprenden nada.

¿Cambiar de mentalidad o intentar hacer entrar en razón a la gente?
Hace tiempo que me di cuenta de que es completamente imposible.

Me gustaría añadir una reflexión sobre algunos aspectos de la sociedad actual que considero muy graves.
El oportunismo y la búsqueda extrema del ego.
Y, sobre todo, que la gente solo es valorada por lo que tiene (o puede dar, en diversos ámbitos) y no por lo que es como persona.

Nos deslizamos cada vez más rápido por una pendiente peligrosa.
Y me temo que cada vez iremos a peor.

Por ello, para las próximas Navidades, después de hacer una petición a través de un pedido virtual desde el ordenador, mandaré imprimir una camiseta con las palabras :

«No, gracias».

Entrega solicitada exclusivamente vía drones, por supuesto.
Y a los que me pregunten :

«¿Por qué no gracias?».

Responderé :

«Ya no me interesan las conversaciones».

Ahora vivimos en un mundo de charlatanes e incompetentes.
Un mundo que nunca se puede tomar demasiado en serio.